Escritos
El comienzo
Cuando las palabras se hagan eco pleno
del camino andado.
Y cuando el silencio no cree un vacío
sino que lo colme de tiempo vivido.
Cuando las acciones sean espontáneas,
del deseo humilde de crecer a tiempo.
Sin que la quietud de miles anclados
agobien la calma de vivir sin pausa.
Cuando los oídos tan solo escucharen
De la misma forma a todos los vientos
y sean genuinos, sinceros, cabales
tales pensamientos.
Y cuando el cansancio
ilumine tanto trabajo y esfuerzo
de un tiempo otorgado.
Estarás atento en cada jornada,
veras a que hora nace la mañana.
Estarás despierto sin descuidar nada,
harás que tus manos ajadas y fuertes
puedan agarrar delicadamente
las manos de un niño tan humildemente
y mostrarle todo, sin decirle nada.